ayunar para mí, es un acto de amor

 

“Cada uno es lo que come, y come según lo que es” ~ Bhagavad Gita

 

Descansar, esa palabra. ¿Por qué esperamos a que nos de una gripa terrible para darnos permiso de parar y descansar? ¿Cuándo fue la última vez que por un día te quedaste en la cama, no trabajaste y realmente descansaste del ruido, la velocidad, la competencia, el movimiento sin pausa? Mira la naturaleza. Está compuesta de ciclos. 

Después del día llega la noche y con ella el dormir. Después del verano las hojas de los árboles cambian de color para luego caer en el invierno. Así, los árboles mudan, algunos animales cambian su pelaje o su piel, la oruga se recoge para convertirse en mariposa. ¿Y nosotros? nosotros vamos a mil por hora. Estamos cada vez más desconectados de los ciclos. Dormimos poco, nos alimentamos sin calidad, no paramos. No es de extrañar que el cuerpo entre en huelga y te suplique por medio de una enfermedad, que necesita enfriarse, porque como los autos, está sobre-calentado. 

Se me ocurre pensar en los animales que se retiran a sus guaridas durante el invierno y no comen, o en uno mismo cuando está enfermo y no le apetece comer porque la energía del cuerpo está puesta en otra parte. Esa es la medicina del ayuno que te permite regenerar cuerpo y mente de manera natural. Desde dentro hacia afuera. Por eso hoy te quiero hablar del ayuno. Los ayunos son una manera de permitir que nuestro cuerpo descanse y que el alma encuentre alivio. Ayunar de manera voluntaria es un acto de amor, de devoción, de gratitud, de descanso y de desprendimiento. Es un momento para escuchar y fortalecer tu cuerpo y tu mente. Es un momento para calmar tus pensamientos y llevarlos a una vibración más alta. Cuando haces un ayuno consciente, entras en un periodo de descanso profundo y la energía que deberías estar usando en la digestión, tu cuerpo la toma y la usa a su favor. El ayuno te da una nueva perspectiva de la vida, de tus rutinas, de la forma en que te relacionas con los alimentos, con tus sentimientos y emociones. 

En el campo de yoga, ayunar está íntimamente relacionado con los Niyamas que hacen parte de la vida de todo yogi. El ayuno puesto al servicio del amor, limpia tu cuerpo y también tu mente (Sauca). Te da la oportunidad de apreciar todo lo que te rodea, de sonreír a la vida incluso en las situaciones más difíciles porque sabes que tu alma realmente está bien (Santosha). En el ayuno aprendemos de la austeridad, la sencillez y en ello nos purificamos y fortalecemos porque aprendemos a soltar para permitir que nuevas bendiciones lleguen a nuestras vidas (Tapas). Durante el tiempo en que ayunas, escuchas tu cuerpo, tu alma, meditas, aprendes a confiar en tu verdadero espíritu y en tu intuición. En tu paz y poder interior que no es más que la manifestación de una fuerza superior que mí me gusta llamar Dios. Así, ayunando entras en el estudio del ser, de ti mismo (Svadhayaya) y cuando el propósito de ayunar es superior a tus deseos egoístas, responde a una necesidad de entrega, devoción y trascendencia, el ayuno te lleva por el camino del Bhakti (Isvara Pranidhana). 

Confía en ti, desde los relatos más antiguos de la humanidad hemos recibido ejemplo sobre el ayunar y sobre la sabiduría que encierra este acto a nivel físico y espiritual. Ayunar entendido de esta manera, no es hacerse daño, no es tortura, no es miedo y no es sacrificio. Si se hace a consciencia y con conocimiento, ayunar es un acto de liberación y es posible hacerlo sin enfermar, sin perder fuerzas, sin enloquecer. Todo lo contrario: desintoxicarás tu cuerpo, eliminarás toxinas, limpiarás tu sistema digestivo y sentirás paz interior. Ayunar desde esta perspectiva es amor porque ayunas también con tus pensamientos y los llevas a una vibración positiva, de compasión y calma.

Tengo 32 años, hice mi primer ayuno a los 21 años y duró 5 días. Lo hice con la ayuda de un libro que conoce el arte de ayunar y con la complicidad de un maestro quien fue el primero en hablarme de esta práctica. Desde aquellos días he ido profundizando en el acto de ayunar. Casi siempre ayuno sola, una vez lo hice en un retiro con el apoyo grupal de otros que también querían hacerlo. A veces ayuno por un día y sé escuchar cuándo hacerlo. Abre tu mente y tu corazón. Integra esta práctica a tu vida yógica con la ayuda de buena bibliografía y de alguien que ya lo haya hecho. Tu cuerpo y tu alma te lo agradecerán.

 

También te comparto este video donde respondo algunas preguntas que me han hecho sobre el ayuno. Entre ellas:

 

¿Por qué ayuno?
¿Qué es y qué no es ayunar?
¿Cuándo hice mi primer ayuno?
¿Me dio miedo ayunar?
¿Uno puede sobrevivir 5 días sin comer?
¿Qué pasa con la sensación de hambre cuando ayunas?
¿Puedo hacer yoga mientras ayuno?

 

 

Si quieres que escriba más sobre este tema, dímelo. Para muchos puede ser algo nuevo, asustar y parecer completamente imposible. Así que de corazón te cuento mi experiencia y referencias en las que te puedas apoyar. 

Sat Nam

Jagat Kaur
Songdo, Corea del Sur

 

Enlace relacionado con esta publicación (dale clic al título para leerlo):

Mis 5 días de ayuno: Afirmaciones para ayunar

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